El presidente de la Comisión Federal de Competencia (CFC), Eduardo Pérez Motta, confirmó que el gobierno mexicano condiciona a Teléfonos de México (Telmex) a bajar sus tarifas de interconexión, permitir que otros operadores entren a su red y compitan en su mercado de telefonía fija para que esta empresa de Carlos Slim obtenga el cambio de título de concesión y pueda entrar al mercado de televisión restringida, y con ello al negocio del triple play que hasta ahora dominan las empresas de televisión por cable y con ellas Televisa.

El vocero de Grupo Carso, Arturo Elías, tiene razón cuando dice que lo estamos condicionando, es cierto y lo saben desde 2005 porque está en documentos publicados por la comisión desde octubre de 2005. La interconexión es la tarea pendiente de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), de Telmex y Telcel.

Con un sector de telecomunicaciones enfrentado por las tarifas de interconexión y el control de la televisión de paga, la SCT y la Cofetel se han limitado a señalar que en México existe libertad tarifaria, por lo que por ley sólo pueden intervenir para resolver diferendos.

La secretaría señaló que revisa si Teléfonos de México cumplió con las condiciones del acuerdo de convergencia –interconexión, portabilidad numérica e interoperabilidad de redes–, y al igual que la CFC condicionó el cambio de título de concesión de Telmex y el permiso para que entre al mercado de televisión de paga.

Las dos entidades encargadas de generar políticas públicas y regular el mercado de las telecomunicaciones en el país reaccionaron con un comunicado a los crecientes enfrentamientos entre operadores, que el martes pasado llegó a mayores dimensiones cuando Televisa, Iusacell, Nextel, Axtel, Marcatel y Megacable, y otros, entre ellos sus filiales, anunciaron la integración de un frente para conseguir que Telmex y Telcel reduzcan sus tarifas de interconexión o dejen de cobrarlas, ya que este bloque dijo estar dispuesto a no cobrarles a las empresas de Carlos Slim si recibían un trato recíproco.

Por la CFC, Eduardo Pérez Motta defendió su propuesta de dejar entrar a Telmex al negocio de la televisión de paga, siempre y cuando acepte dar tarifas de interconexión competitivas y dejar que compitan en su mercado de telefonía fija e Internet; entonces las televisoras tendrán que dejarlo competir en el negocio de la televisión restringida.

Pérez Motta dijo que los opositores a Telmex y Telcel, integrados en el frente Todos unidos contra Telcel (Tucotel) también tienen que cumplir con sus obligaciones de inversión y desarrollo de redes, pero eso no lo puede condicionar ni verificar Telmex.

La CFC tiene responsabilidad

El diputado Javier Corral Jurado (PAN) aseguró que la CFC cuenta con atribuciones legales para intervenir en el diferendo de Telmex con Televisa y Televisión Azteca por las tarifas de interconexión y publicidad.

La Ley Federal de Competencia Económica le da el marco legal para definir cuáles son barreras de entrada, prácticas discriminatorias y anticompetitivas. Entonces, la CFC también tiene una responsabilidad, no sólo la Comisión Federal de Telecomunicaciones, dijo.

Añadió que Carlos Slim debería aceptar un acuerdo con las televisoras sobre las tarifas de interconexión, pero al mismo tiempo aplicar la ampliación que Cofetel y la CFC, con aval de la SCT, le dieron a su título de concesión para otorgar servicios de televisión restringida.

“Ya debía dar el gran paso de entrarle a un mecanismo de definición de la tarifa de interconexión y exhibir que, el fondo del problema no son las tarifas, sino que no lo quieren en la televisión.

Porque el único que tiene, además de músculo financiero, el despliegue nacional de una red que podría ser más potente que las dos televisoras juntas es Carlos Slim, declaró.

Corral consideró que ambas televisoras presionan a Telmex con las tarifas de interconexión, con cual estamos todos de acuerdo, porque el señor nos asalta en despoblado, pero el ingeniero debería tomar la decisión de quitarles la máscara y decir que ese no es el problema, y que se fijen reglas.

Planteó que puede fijarse un tope a las tarifas con tres elementos: la inversión de la red, la amortización por el uso de ésta, y una utilidad razonable.

El Estado, ausente

Los presidentes de las comisiones de Comunicaciones y Transportes, el priísta Fernando Castro Trenti, y de Radio y Televisión, Carlos Sotelo, coincidieron por separado en que en el conflicto entre los monopolios televisivos Televisa y Tv Azteca contra Teléfonos de México de Carlos Slim, lo que hay es la ausencia del Estado mexicano, la ausencia de un órgano regulador. Es momento de que la autoridad asuma su papel, porque hace falta el árbitro, no es sólo una pugna entre particulares.

Castro Trenti subrayó: en este caso de Televisa y Tv Azteca y la mayoría de las empresas telefónicas contra Teléfonos de México, lo claro es que tenemos graves problemas que tienen que ver con la abulia y los intereses ajenos al nacional.

El priísta sostuvo que no es un conflicto sólo entre particulares, son monopolios y por lo tanto existe una ley que debe aplicarse y llamarlos al orden. Es momento de que la autoridad asuma su papel. Hace falta el árbitro, el responsable de articular los intereses del sector. Lo evidente es que hubo un abandono y una manipulación expresa entre los intereses de los sectores que tienen que ver con comunicaciones y transportes por parte de Juan Molinar Horcasitas”.

Castro Trenti subrayó que fue el ex secretario Molinar el que generó la ruptura de una adecuada política pública de los sectores aeronáutico y de telecomunicaciones.