El regreso del gusano de fierro
Saldos del neoliberalismo // Monstruosa desigualdad // Arranca el Interoceánico
espués de casi cinco días de permanecer cerrados los cruces ferroviarios de Eagle Pass y El Paso, en Texas, fueron reabiertos por el gobierno de Estados Unidos. Asociaciones empresariales de ambos países saludaron el levantamiento de una medida que generó pérdidas de 100 millones de dólares diarios al detener el tránsito de mercancías entre dos socios que sostienen una de las relaciones comerciales más intensas del mundo. El lunes pasado, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) cerró dichos pasos con el fin de que el personal de aduanas apoyara a los agentes de la Patrulla Fronteriza en tareas de vigilancia y detención de migrantes indocumentados.
A Cristina Pacheco
racias por el mar, las jacarandas, las recámaras, la música, los cines, las mentiras, las miradas, los quirófanos, las avenidas, las vías del Metro.
ara cerrar este año, aniversario de golpes de Estado significativos, resulta imprescindible recordar la intervención estadunidense directa sobre la pequeña isla de Granada –Gwenad, en créole– el 25 de octubre de 1983 con el nombre de Furia urgente, encubierta por la Organización del Caribe Oriental, dominada por Gran Bretaña y Estados Unidos, mediante el despliegue de 7 mil 300 soldados contra una supuesta alianza militar cubano-soviética con el golpista Hudson Austin que acababa de eliminar al legítimo presidente Maurice Bishop (verdadero aliado de Cuba), y presentada como operación de restauración de la democracia. Esta es, suscinta, la esencia de una trama fraguada al calor de la llegada de Ronald Reagan al poder en 1981 y encaminada desde Los documentos de Santa Fe que marcaron el retorno descarnado de la guerra fr í a, con objetivos, recursos y lenguaje ampliados a la circunstancia del naciente neoliberalismo, que pretendía, ya no la contención del comunismo, sino su rollback mediante una escalada militar y propagandística sin precedente. Apareció la Guerra de las galaxias para luchar contra el Imperio del mal, militarizar el Caribe y Centroamérica para, finalmente, liberar a Cuba.
omo secretario del Consejo de Salubridad General (CSG), Marcos Cantero comunicó que durante 2023 el organismo erradicó
prácticas inerciales, conflictos de intereses y vicios que se anteponían
a su foco de atención: los pacientes
, la premisa
de su trabajo. Pretende garantizar
el mejor medicamento disponible, no el más barato, el mejor que el anterior y los más altos estándares de calidad en servicios de salud (La Jornada, 17 y 18/7/23).
a muchos lo han dicho muchas veces: las comparaciones son la manera en que conocemos el mundo. Llegamos a comprender algo nuevo y desconocido al relacionarlo con algo viejo y familiar y ante lo que sabemos actuar. Desde hace 11 semanas los civiles palestinos en Gaza no sólo han estado sufriendo ataques indiscriminados de la máquina militar israelí (bit.ly/4aoz99c) alimentada sin cesar por Estados Unidos –con saldo de más 20 mil muertos, en su mayoría niños y mujeres, decenas de miles de heridos y 2 millones de desplazados–, sino también la máquina cognitiva global
que hace todo para deshumanizar e invisibilizarlos. Sobre sus cabezas no sólo caen bombas, también palabras –al ser comparados por Israel, por ejemplo, con los nazis
(bit.ly/3SfQiLx)– y algo incluso más letal que ellas: sus prohibiciones a rebours (bit.ly/486JXHH). Igual ha sido durante las masacres anteriores (bit.ly/3RFLZrk).
na de las armas favoritas del poder es la descalificación de aquellos que se le resisten. Sabe que no basta con aplastarlos físicamente, porque a los ojos del mundo entonces se les convierte en víctimas, si no es que en héroes o mártires. Para evitar este resultado contraproducente, se busca mentir, distorsionar e incluso dar una explicación a fondo que mitigue la indignación que causan los excesos y maltratos que un país comete contra hombres, mujeres y niños inocentes. Así, Trump declaraba hace poco que los migrantes son un virus que envenena la sangre de Estados Unidos
y, poco antes, el gobierno Israelí (el ministro de defensa Gallant y el premier Netanyahu) argumentaron que más que de un genocidio, en Gaza se trataba de una lucha del Bien contra bárbaros subhumanos
. ¿Subhumanos?, una manera de responder es recordar a Louis Agassiz, un famoso paleontólogo suizo del siglo XIX que fue a Estados Unidos y que sufrió una profunda crisis. No podía conciliar su caritativa religiosidad con la visceral y poco misericordiosa repugnancia que sentía al ver a los de origen africano. “Fue en Filadelfia –cuenta él mismo– donde por primera vez entré en contacto prolongado con los negros sirvientes en el hotel.” Y le fue “imposible librarse del sentimiento de que ellos no son realmente de la misma sangre que nosotros…”. Se refugió entonces en la teoría de la poliginia, para sostener que Dios había creado varias razas diferentes de hombres que tienen caracteres físicos distintos
y cuya existencia a los científicos “nos obliga a establecer un ordenamiento entre estas razas…” de acuerdo con las características peculiares a cada una
, por ejemplo, el color de la piel. El concepto de razas superiores e inferiores fue entonces pacientemente documentado por este científico de Harvard, a quien hoy esa institución todavía honra al dar su apellido al museo de antropología (en Gould, The Mismeasure of Man: 78).
esearía dedicar mi último artículo de 2023 a desearles a todos felices fiestas y próspero año nuevo. Pero sería de una enorme hipocresía hacerlo.