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¿Quién diablos es Noverre?
"He dicho, señor, que había exceso de composición en la danza, y que el movimiento simétrico de los brazos era demasiado uniforme para que los cuadros tuviesen variedad, expresión y naturalidad; por lo tanto, si deseamos que nuestro arte se acerque a la verdad sería necesario prestar menos atención a las piernas y más a los brazos; abandonar las cabriolas en beneficio del interés de los gestos; realizar menos pasos difíciles y darle mayor importancia al juego de la fisonomía; no poner tanta fuerza en la ejecución, sino infundirle más espíritu; apartarse con gracia de las estrechas reglamentaciones de la Escuela para seguir las impresiones de la naturaleza y dotar a la danza del alma y de la acción que debe tener para interesar. Por otra parte, no llamo acción la que consiste únicamente en moverse, trabajar, esforzarse y atormentarse como un loco para saltar o para mostrar un alma que no se tiene.
"En materia de danza, la acción es el arte de transmitir nuestros sentimientos y nuestras pasiones al alma de los espectadores, por medio de la expresión verdadera de nuestros movimientos, de nuestros gestos y de la fisonomía." Escribe Jean-Georges Noverre, a mediados del siglo XVIII, en su "Carta X " de Cartas sobre la danza y sobre los ballets. Noverre es un coreógrafo y teórico de ruptura. Si eliminamos los elementos retóricos que señalan que la cita anterior fue escrita más de dos siglos atrás, podemos asimilar su vigencia. Noverre ejemplifica la lucha que se da entre la academia y la innovación. Enarbola el conflicto generacional en las artes hasta los años 1960 con el surgimiento de la postmodernidad: "Exigir acción y movimiento en las escenas, alma y expresión en la danza; señalar el intervalo inmenso que separa al mecanismo de la profesión del genio que coloca a ésta al lado de las artes." El eterno conflicto entre la dicotomía entre forma y fondo.
Lo que importa a Noverre es llegar a la sensibilidad del espectador sin fórmulas.
Sasha Waltz |
Noverre fue un innovador al articular la vanguardia de su tiempo; protegido de María Antonieta, llegó a ser maestro de ballet de la Academia Real de Música, pero nunca pudo llegar a coronarse en la Ópera de París. Su última obra fue estrenada en Londres el mismo día en que Luis XVI fue guillotinado. Fruto de la Ilustración, Noverre rompe con los moldes y teoriza sobre el arte de bailar: "La danza es el arte de los pasos, de los movimientos graciosos y de las bellas actitudes. El ballet, del cual la danza es ornamento, consiste en el arte de dibujar figuras. La pantomima es el arte de expresar las emociones por medio de los gestos. La pasión los guía, mientras que el buen gusto y la gracia rigen los movimientos de la danza. El genio creador es aquel que por medio de combinaciones, figuras y relaciones entre estas partes, realiza el conjunto que constituye el espectáculo. Estas tres cosas diferentes forman unidas el ballet de acción, o de otro modo el ballet-pantomima-drama."
Calificado por David Garrick –notabilísima figura del teatro inglés– como el "Shakespeare de la danza" y allegado a Voltaire y Diderot, Noverre es maestro de Jean Dauberval quien crea, bajo sus enseñanzas, La fille mal gardée, ballet que incorpora la cotidianeidad a través del mundo campesino y elimina al Olimpo de la escena, obra estrenada quince días antes del estallido de la Revolución francesa. Qué mejor indicio de la ebullición por el cambio social que la ideología de Noverre. Queda atrás la monarquía y surge un nuevo orden.
Por todo esto, el ITI-UNESCO desde 1982 institucionalizó el 29 de abril como Día internacional de la danza, conmemorando el nacimiento de Jean-Georges Noverre. Cada año, una personalidad global se encarga de enviar un mensaje al mundo. Ahora está a cargo de la considerada como sucesora de Pina Bausch, Sasha Waltz: "Bailamos en los cumpleaños, las bodas, en las calles, en salas, en el escenario, tras bambalinas. Para comunicar la alegría, el pesar, como ritual y experiencia limítrofe. La danza es un lenguaje universal: mensajera para un mundo de paz, para la igualdad, la tolerancia y la compasión. La danza nos enseña a ser sensibles, conscientes y a poner atención al momento.
"La danza es la manifestación de que estamos vivos. La danza es transformación. La danza nos descubre el alma, la danza da al cuerpo una dimensión espiritual.
"La danza nos hace capaces de sentir nuestro cuerpo, de elevarnos, de ir más allá, de ser otro cuerpo.
"Bailar es participar activamente en la vibración del Universo."
Abril es el mes de la danza.
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