En solidaridad con la estudiante Lucía Morett, sobreviviente del ataque del ejército colombiano contra un campamento de las FARC, el primero de marzo de 2008, un grupo de artistas realizará este domingo y lunes una jornada cultural con la que busca presionar a las autoridades mexicanas para evitar que sea extraditada a Ecuador.

La brasileña Clarice Lispector (Tchetchelnik, Ucrania, 1920-Río de Janeiro, 1977) fue siempre una escritora que habló más a través su obra y no a la luz de las cámaras fotográficas y los reflectores, como lo hacen muchos. No se codeó con los grupos literarios de vanguardia, no fue asidua a las entrevistas, no le interesó construirse una imagen de intelectual. Prefirió, por el contrario, reservar su intimidad a la escritura.

La literatura de Paul Auster está inundada de simbolismos, sus libros son un abigarrado conjunto de interconexiones: personajes, nombres, diálogos pasan de una novela a otra disfrazados, se ocultan; el espacio y el tiempo donde se desarrollan las historias también esconden innumerables significados. Su escritura se ha convertido en un lenguaje a descifrar, e Ivonne Saed escudriña tres de sus obras –La invención de la soledad, El país de las últimas cosas y Ciudad de cristal– lo que implica hablar no sólo de temas muy austerianos sino de cuestiones que aquejan al hombre actual. Sobre Paul Auster: autoría, distopía y textualidad, Ivonne Saed. Lectorum, 117 pp. Precio de lista: 119 pesos.

Es innegable que la ficción ha servido siempre para jugar con la realidad. Sin embargo, no todos los escritores hilvanan el juego con el humor. Woody Allen lo hace y consigue hacer honor al título de su más reciente libro, Pura anarquía. Rompiendo con la solemnidad y caricaturizando a cuanto personaje se tope en su camino, el cineasta ha dejado que lo absurdo y ridículo de la realidad fluya y se exhiba a través de esta serie de relatos que logran arrancar carcajadas.